Casa Luis
villa de lujo en Porreres, Mallorca, España

La villa está a 10 minutos en coche del pueblo, por lo que es tranquila, discreta y está escondida. Además, puedes llegar al mar en sólo veinte minutos.

Al mismo tiempo, tienes todas las instalaciones modernas que necesitas.

La antigua estructura se reconstruyó por completo en 2021 con piedras, tejas, vigas, puertas y ventanas antiguas y tradicionales. Es uno de los lugares más románticos de Mallorca, una obra maestra arquitectónica que mezcla las comodidades modernas con detalles antiguos y tradicionales.

Tu pareja y tú os sentiréis como la realeza residiendo en este edificio de influencia balear con curvilíneas paredes de cal blanca. Los cálidos suelos de cal suave pulida con cáscara de huevo, la solería de piedra de río y el aire fresco de la naturaleza calman a todos los viajeros cansados.

A diez minutos del pueblo de Porreres, entrarás en el camino de entrada privado y encontrarás un tesoro discreto y escondido. Con sus vistas abiertas al campo, esta antigua y tradicional estructura se recompuso por completo en 2021 con materiales tradicionales.

Nos desmayamos por las curvas femeninas de las paredes encaladas y los cálidos suelos pulidos de cáscara de huevo y piedra de río. El rediseño se inspiró en la tradición balear y la vida moderna, y la ligereza impregna todas las habitaciones.

Este alquiler vacacional en Mallorca tiene cinco dormitorios y cinco cuartos de baño, con capacidad para ocho huéspedes. Los dormitorios tienen camas y almohadas grandes y colores terrosos, mientras que dos de los cuartos de baño tienen grifería de latón personalizada y el cuarto de baño principal en suite tiene su propia chimenea y una bañera Tadelakt.

Anticipándose a su posición como casa ideal para familias, también abundan las oportunidades de esparcirse y relajarse, desde la zona de hamacas a las terrazas y la piscina.

SOBRE PORRERES, MALLORCA

Casa Luis está situada en el centro de la isla, a treinta minutos en coche de las playas más hermosas de Portocolom, Sananyí y Artà.

La encantadora y cercana ciudad de Pollença, a treinta minutos en coche, está formada por sinuosas callejuelas llenas de pequeñas boutiques y tiendas de regalos que venden productos artesanos locales alrededor de la Placa Major. Haz una parada en la iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles, del siglo XVIII, con su impresionante rosetón, y en el Museo de Pollença, con su colección de esculturas prehistóricas y arte contemporáneo. También acoge el célebre festival de música clásica de la ciudad y la Feria de Arte de Pollença a principios de noviembre.

Palma está a 45 minutos en coche y hoy en día se parece más a una mini Barcelona, con elegantes bares, cafeterías, restaurantes y tiendas, y la impresionante Catedral de Palma La Seu en su corazón.

No te pierdas el cercano mercado de alimentos de Santa Catalina los sábados por la tarde, con su «Tardeo» que convierte las calles en un gran punto de encuentro de gente, comida y diversión. El antiguo pueblo de pescadores de Portixol, a las afueras de Palma, se ha convertido en el nuevo lugar de moda para vivir, y es un sitio ideal para pasear por la playa y tomar unas tapas.